5 consejos para optimizar la velocidad de carga de nuestra web. La relatividad del tiempo
Según los expertos en diseño web, la velocidad de carga óptima de cualquier página web debe ser inferior a los tres segundos. Pero, ¿qué son tres segundos? Lo rápido que pasa ese tiempo cuando estamos haciendo algo que nos gusta y lo realmente lento que avanza el segundero del reloj cuando, sentados delante del ordenador la página web que necesitamos mirar no termina de cargar. Ya lo dijo Einstein, el tiempo es relativo y un arma de doble filo. (Bueno, esto último no lo dijo, al menos no tenemos constancia de ello, pero seguro que lo pensó). Vivimos en la era de la tecnología y de la inmediatez. Queremos las cosas y las queremos ahora y como usuarios de Internet nos gusta navegar por sitios web a un ritmo mucho más rápido que hace diez años. Unos pocos segundos de diferencia con nuestros competidores marcarán la diferencia, aumentando nuestras posibilidades de que el usuario acabe comprando en nuestra tienda online.
El tiempo que tarda nuestra página web en cargar es fundamental si no queremos que los visitantes desistan en su intento y se marchen a la competencia. Por suerte, existen una serie de herramientas que nos servirán para hacernos una idea de los segundos que pasan desde que cualquier usuario teclea el nombre de nuestra empresa en el buscador hasta que nuestro sitio web está listo y cargado para poder trabajar sobre él. WebPageTest, New Relic, GTmetrix, Yslow o Google Developers, la herramienta gratuita de Google, son algunas de ellas.
Si eres de los que acabas de descubrir que tu sitio web va más lento que un operador de telefonía (chistes aparte) no tienes, y nunca mejor dicho, tiempo que perder.
Pero si tal y como venimos viendo hasta ahora, la velocidad de carga de una página web es tan importante porque repercute no solo en las ventas, también en el SEO, en el branding y en la experiencia del usuario, ¿por qué en lugar de ir más rápido va más lento aún si cabe?
Como mencionamos en anteriores entradas una de las tendencias en cuanto al diseño web es la utilización de imágenes de alta calidad como reclamo para los visitantes. Además, se incluyen vídeos, animaciones… y si vamos sumando todo eso lo que se obtiene es una web más atractiva con el inconveniente de que tarda más en cargar. ¿Cómo encontrar el equilibrio? ¿Qué otros factores afectan a la velocidad de carga?
Cómo mejorar la velocidad de carga de nuestra web
1.- Elegir el servidor adecuado. Conviene, una vez más, empezar la casa por los cimientos si queremos que todo funcione a la perfección. ¿De qué depende la elección del servidor? Del tipo de web que tengamos y de lo que queramos conseguir con ella: nuevos lectores, más clientes, etc. Por ejemplo, optar por un hosting compartido es una idea muy inteligente para quien no tenga unos conocimientos avanzados sobre la gestión de servidores. Al ser el alojamiento compartido su coste es menor, con la desventaja de que el espacio del que dispondrás será inferior al ser, como su propio nombre indica, compartido por otros usuarios.
En cambio, el servidor dedicado se trata de un hosting propio más potente, siendo la solución más eficaz para una tienda online, por ejemplo.
2.- Configuración del servidor y de la web adecuada. La configuración del caché es otro de los elementos que afecta a la velocidad de carga. Para que te hagas una idea, nos referimos a la memoria en la que se almacenan temporalmente todos los datos que con más frecuencia son solicitados por los internautas que visitan nuestra web o blog. Lo que permitirá que la próxima vez que se acceda a ella cargue más rápidamente.
3.- No utilizar un lenguaje de programación desfasado y detectar si tu web tiene errores de programación. Una vez localizados y corregidos podremos disfrutar de una página más funcional.
4.- Limitar el uso de animaciones y reducir el tamaño de las fotografías, ya que de lo contrario se ralentizará la velocidad de carga. Por este motivo, se recomienda no sobrepasar un máximo de 7 animaciones y si se puede, evitar la música – que puede ser bastante molesta- y alojar los vídeos demasiados pesados fuera del servidor.
5.- Adaptar la web a los distintos dispositivos móviles. La cuarta parte de las ventas online a nivel mundial se realizan a través del móvil. Un dato significativo y muy jugoso. Para poder beneficiarnos de esta fórmula de éxito debemos arriesgar y apostar por un diseño responsive de nuestra web o e-commerce para que se visualice correctamente desde cualquier móvil o tableta.
Si necesitas ayuda con alguno de estos cinco puntos no dudes en pedirnos un presupuesto para mejorar y optimizar tu tienda online, blog o página web. Estudiaremos con detalle cada uno de ellos para determinar el origen del problema.
5 consejos para que nuestra página web cargue rápido Clic para tuitear
Deja una respuesta